Poema de
oro
Os propongo
compañeros algo parecido a un juego.
Quiero saber
que os parece, y si el asunto merece,
proseguir
este recreo.
Se trata de proclamar
de muy sencilla manera,
la opinión
que nos merecen nuestros bonitos poemas
eligiendo en
un certamen, el que mejor nos parezca.
Sin buscar
pena ni gloria, sólo el posible disfrute,
dejaremos
boca abajo, sobre una mesa el trabajo,
una ignota
poesía, sin señales de autoría.
Voluntarios
de entre todos, que podremos ser cualquiera,
les asignarán
un orden para pasar a leerlas,
y lo harán
con todo el arte que para ellos quisieran.
Todos los
presentes oyen y toma notas a un tiempo.
Finalizado el
poema, cada uno a su entender
le asigna
una puntuación, por ejemplo, de uno a diez.
Se recogen
una a una, las hojas de resultados.
Un Jurado hace
el recuento de los poemas en juego,
y siguiendo
el protocolo, se informa del más votado.
Cuando llega
este momento, el autor se identifica,
aplaudimos
satisfechos, como halago, su trabajo
y así el “Poema
de oro”, es por todos proclamado.
Y se acabó,
eso es todo. ¿Os parece distracción
o,
intentamos entre todos encontrar mejor opción?.
¿Lo damos
por aceptado... o, mejor lo abandonamos?.
Desde ahora queda
abierto el turno de la opinión.
Manuel Rodríguez Ibáñez 13 de Enero de 2019
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